Segundo disco de Pycaya, banda de groove metal de Barcelona, a quien ya conocíamos por su anterior trabajo, ON.  Comparándolos, lo primero que salta es que la banda ha perdido más de la mitad de su membresía y solo quedan los guitarristas Sergio y Antonio.

 

Desde el inicio con “Tres almas” nos damos cuenta que el sonido es crudo y habrá quien lo enmarque dentro del metal moderno. Comienzan las comparaciones y habrá quien piense que se parece a S.A., Ktulu, Koma o Narco, pero yo no lo veo del todo claro aunque finalmente si hay que buscar similitudes, por aquí van los tiros. Lo que sí es evidente es que se trata de metal acelerado con momentos marchosos y atractivos.  

 

Comienzo a prestar atención a las letras y hay un par de ellas cuyo sentido casi que me disgusta, aunque cada cual escribe y expresa lo que desea. Son consecutivas y se trata de “Sucio Socio”, donde odias a quien fue tu amigo según la letra, sin pensar que el odio te desgasta a ti y no a él, y la otra es “Jodido”, donde se culpa a todo el mundo de que estés jodido y al mismo tiempo no haces nada para salir de allí. Y esto me recuerda a alguien que hace eso mismo, culpar a los demás de su situación.

 

Y es esto el más claro ejemplo de que las letras están escritas de una manera que te pueden afectar. Lo han logrado en ese sentido y si se suma que la música es contundente, logran impactar. A esto hay que agregar la influencia del thrash en la manera de hacer los solos de guitarra, que no es que abunden por doquier, pero cuando se hacen, tienen ese toque ochentero, como ocurre en “Deseo Tóxico” y “Nada Nuevo”, donde las líneas de los solos escapan de la melodía y llega el momento que resultan erráticos en la mejor tradición de la Bay Area. La segunda es una versión de la banda Kosto and Full donde anteriormente militaba el guitarrista Antonio Muñoz. 

 

Cierra con otra versión, en este caso de ellos mismos. “Cuervo de Fe 2.0” pertenece a ON.  Una avalancha que roza el grindcore más clásico y nos deja totalmente cargados de adrenalina. De esta manera Pycaya vuelve a estar en el candelero con estas siete canciones cargadas de energía.  

 

El disco fue grabado en los New Noise Studios de Barcelona y masterizados por Ricardo Estrada en los Hollywood Restroom Mastering Studio.