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Viernes 4 de marzo
Sala Silikona, Madrid.

  
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Aun viviendo en Madrid era la primera vez que me acercaba a la Sala Silikona, de la cual me llevo una buena impresión tanto por la iluminación como por el trato de su personal. Esa noche Serious Black tenía una banda telonera de la cual no pude disfrutar. Entre la tardanza en llegar y las dificultades de aparcar, se me fue demasiado tiempo. Cosas de novatos.
 
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Estaba muy entusiasmado por ver a Serious Black luego de haber escuchado detenidamente su nuevo disco 'Vengeance is Mine', cargado de buenas canciones y algo más. En primer lugar y detalle palpable, la entrada del nuevo vocalista Nikola Mijic. Que no es que Urban Breed fuera un mal cantante, ¡para nada!, pero Nikola venía con un bagaje musical diferente y pensé que esto se haría sentir en el directo. Por otra parte, el hecho de que el bajista y principal compositor de la banda, Mario Lochert, nos hubiera comentado en una personalísima entrevista que por primera y única vez en su vida había plasmado sus problemas personales en la música, lo cual le daba al disco un matiz diferente. Y apunto que está entrevista especial se dio gracias a Oscar Rilo de Hueso Producciones, quien le comentó a Mario que yo hacía buenas entrevistas, y lo preparó para darme unas respuestas a corazón descubierto.
 
Ya antes, tanto Mario Lochert como el guitarrista Dominik Sebastian habían conversado con Raúl Cardona sobre el nuevo disco y como fue precisamente en España donde la idea de formar la banda se definió, en conversación con Roland Grapow cuando Mario formaba parte del equipo de Masterplan. Una buena idea que cinco discos después los traía de regreso a España en tres fechas y con la promesa de regresar este mismo año.
 
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El concierto comenzó con los sonidos iniciales de “Akhenaton” y la banda que estaba al fondo de la sala entró al completo para atacar con los instrumentos mientras Nikola se hacía esperar unos segundos más. Su entrada fue con un fallo de sonido y la ausencia total de voz en las bocinas de salida al público. Un minuto más tarde con el problema ya solucionado, continuaba la canción y el concierto. Una anécdota que no empañó el desarrollo del evento. 
 
Nikola Mijic en todo momento alentaba al público, que ya estaba energizado por el trabajo de los teloneros y que con Serious Black realmente tomó elevadas cotas de energía. Estuvo muy bien que una canción como “Rock With Us”  estuviera entre las primeras. Hay quien la ve como un himno de la banda de cara al futuro, pero no lo creo. Hay canciones con mucho más gancho tanto en “Vengeance is Mine” como en el repertorio clásico de la banda, que Nikola defendió especialmente bien en piezas como “Heartbroken Soul”, “I Seek no Other”, y la que si es todo un gancho, “Older and Wiser”. 
 
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La primera vez que escuché “Senso Della Vita” pensé que Nikola era italiano. La canción también tiene gran pegada y ya a estas alturas del concierto los aplausos y vítores eran realmente estruendosos. Nikola canta muy bien, y a veces es apoyado por efectos de reverberación desde la mesa de mezcla. “Mr Nightmist” sonó genial con toda la banda entregada. Tanto Mario como el guitarrista Dominik Sebastian hicieron poses especiales para los móviles de la audiencia con toda naturalidad.
 
La energía gestual del batería Ramy Ali  con su barba al rojo vivo llamaba la atención, siendo al mismo tiempo el encargado de disparar los samplers. Para “Out of the Ashes”, Mario tomó el micrófono para hablar de la canción donde cuenta lo que ocurrió tras ser engañado, y si estabas prestando atención, te habrás dado cuenta que esa herida aun no ha cerrado del todo, pero él está por la labor de que cicatrice lo más pronto posible.
 
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Se despedían con esa canción pero todos sabían que debía haber un bis, y la banda decidió no salir y esperar que pidiéramos otra, sino continuar. No había que  animar a la audiencia que estaba ya al máximo, y que con “The Story”  encontró un momento agradable, provocado por esa versión, antes de cerrar con “High and Low”. A los músicos se les veía felices y contentos con el resultado y la audiencia recibía y entregaba el mismo sentimiento. La normalidad viene como puede, y ya va siendo el momento de comenzar a ver conciertos, que en cierta medida reflejaran una nueva era, la de la post pandemia, lo quiera el virus o no.
 
Categoría: Crónicas