Mascot Label Group © 2019

Tracklist:
1. Havin’ It
2. I Own a Building
3. Everywhere That Mary Went
4. Love Is the Saddest Thing
5. Sir, You Need to Calm Down
6. Let That Battery Die
7. Blues for Rabbit
8. Every Snare Drum
9. A Snake Just Bit My Toe
10. I Love My Lawnmower
11. A Herd of Turtles
12. Things Can Walk to You

Si decides escuchar un disco de Paul Gilbert a estas alturas de la vida, a menos que seas un nuevo fan del género musical, sabes que el magnífico guitarrista lo que hace es divertirse. No quiere decir esto que su manera de hacerlo sea incomprensible, pero sí que no le importa mucho lo que pensemos. Y como ocurre con otras miles de personas en este mundo, captamos algo la idea del chiste, pero no llegamos a reír, como mucho a sonreír.

Y esa es la cuerda de “Behold Electric Guitar”, Un disco donde se mezclan todos los estilos que le gustan a Paul y con ellos hace a su vez mezclas de canciones. Si estas esperando composiciones acabadas con buenos arreglos, pues no las encontraras.  Paul esboza una melodía, o dos, o tres, las une y sobre ellas se desmadra con las seis cuerdas.  Hay quien dice que este es su álbum más accesible y realmente yo lo veo como un disco para escuchar en segundo plano en vez de la bazofia que te meten las emisoras de radio una y otra vez.

También es el disco perfecto para los guitarristas, tanto los que están en nivel básico como en nivel avanzado. Los del primer nivel se frustraran y querrán cortarse las manos, los avanzados sacaran de aquí unas cien ideas para sus próximas canciones. Y es que se trata de un genio, no hay mucho más que decir. 

En cuanto a las canciones, cada cual destacará un par de ellas según sus gustos o incluso su estado de ánimo. Para mi indudablemente la entrada de “Havin’ it” es maravillosa, “Sir, you need to calm down” es una contradicción porque nadie podrá calmarse con la velocidad de la pieza. “Let That Battery Die” es la belleza lograda mientras que “Blues for Rabbit” se basa en un ritmo de esos que lleva cien años escuchándose, pero Gilbert lo toma y sobre el crea todo un andamiaje musical.

Un disco prescindible…a menos que seas melómano…o guitarrista…o músico… o curioso…o… 

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